domingo, 30 de mayo de 2010
No seremos engañados otra vez
No seremos engañados otra vez, estaremos luchando en las calles con nuestros niños en nuestros pies, y las moralejas que ellos verán se irán, y los hombres que nos estimularon se sientan en el juicio de todo mal, ellos deciden y la escopeta canta la canción. Inclinaré mi sombrero a la nueva constitución, daré una reverencia para la nueva revolución. Sonrisas y muecas cambian por todas partes, recogen mi guitarra y tocan justo como ayer. Entonces me montaré en mis rodillas y oraré. No seremos engañados otra vez. El cambio, tuvo que venir, nosotros lo supimos todo el tiempo. Nosotros fuimos liberados del doblez, eso es todo. Y el mundo se mira apenas y la historia no se cambia porque las banderas volarán en la siguiente guerra. Yo me moveré y mi familia aparte, si logramos ser dejados medio vivos conseguiré mis papeles y sonreiré en el cielo. Aunque sea la hipnotización nunca mentira. No hay nada en las calles. Mira algo diferente en mí. Y los lemas serán reemplazados, por el adiós. Y la despedida a la izquierda ahora se despide a la derecha. Y todas las barbas han crecido más durante la noche. Encuentro al nuevo jefe igual al viejo jefe.
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me encanto esta entrada,me gusta lo que escribis.muy lindo todo,te sigo :)
ResponderEliminarMe she kb ke tngas caancionez d los Sui Sheneris + abajo :$:$
ResponderEliminarNo, posta, Botas Locas es ideal para cantarla a todo-lo-que-da en la ruta